El presidente Pedro Pablo Kuczynski decidió no declarar el estado de emergencia en el ámbito nacional porque: "Si bien hay fallecidos y damnificados, no es un porcentaje alto de la población”. Hay ya 62 muertos y 600 mil damnificados. ¿Cuántos muertos son necesarios? ¿Cuánta más angustia y sufrimiento?
En Piura colapsaron los desagües y la gente está expuesta a aguas servidas, las ratas han salido de las alcantarillas, escasea el agua potable y ya hay casos de leptospirosis entre niños. El doctor Hernando Ceballos, congresista del Frente Amplio, dijo ayer en RPP que desde hace un mes, sí un mes, hay quince mil caseríos aislados y que están dadas todas las condiciones para la aparición de diversas epidemias.
En su mensaje al país, PPK dijo que vivimos un “problema climático que no se podía prever”. ¿Perdón? La tecnología permite hoy saber que fenómenos climáticos se avecinan, conocer cuándo y dónde se forma un huracán y si se avecina una tormenta de nieve. Es más, algo tan simple como “weather channel” es capaz de anticiparnos hasta en diez días datos certeros sobre el clima, la temperatura, nubosidad y probabilidades de lluvia usando un radar doppler. Y claro, si el satélite francés comprado por el humalismo hiciera lo suyo el gobierno hubiese podido prever lo que hoy vivimos.
Los huaycos son recurrentes en esta temporada del año; esta vez solo han sido mucho más intensos. Hace más de un mes, Ada Constantino, gerente municipal de la Municipalidad de Lima solicitó oficialmente a Defensa Civil (INDECI) para declarar la emergencia de las fajas marginales de los ríos Rímac, Chilló y Lurín, y distritos limeños de los conos, recicibiendo respuesta negativa de INDECI por no haber sustento técnico. ¿Lo supo el gobierno central?
Kuczynski ha declarado en emergencia la carretera central, que hoy es un río y a los distritos más azotados (justamente los que ahora entran en emergencia). Sin duda, más zonas caerán en la categoría.
¿Y cómo estamos? En Trujillo la Plaza de Armas volvió a inundarse. El río Marañón ha tenido una gran crecida alcanzando las zonas de cultivo en San Buenaventura, Huánuco; el miércoles la ciudad de Puno sufrió granizada e intensas lluvias que anegaron varias calles.
No aceptar lo que pasa y las posibilidades de empeorar, no es buena estrategia. Recordemos…
En enero de 1962 un terremoto desmoronó parte del pico norte del Huascarán provocando un alud que borró del mapa a Ranrahirca. Meses más tarde la NASA alertó de una fisura en otra parte del Huascarán y con ello de otro potencial alud. Se recomendó que Huaraz empezara a crecer en las zonas altas.
El 31 de mayo de 1970 un terremoto desprendió la parte debilitada del macizo, se produjo un alud que sepultó buena parte de Huaraz. Lo único construido en la zona alta había sido el nuevo…¡cementerio!
Dicho esto, al gobierno le conviene ponerse en el peor de los escenarios.
Martha Meier M.Q.
Expreso, 18 de marzo de 2017