SÁBADO 29 DE AGOSTO DEL 2015
A escasos meses de las elecciones nada está dicho, pero resulta interesante reflexionar sobre lo escrito en este mismo diario por Javier Valle-Riestra, reconocido jurista y político de larga trayectoria. “Sin sectarismo alguno vaticino el triunfo de Alan García, en primera vuelta”. Valle Riestra podría tener razón, creo como él que García podría ser Presidente del Perú por tercera vez, aunque para eso tendrá que batirse con Keiko Fujimori en una segunda vuelta y esta cometer algún gran error.
Si García se lleva la Presidencia será, además, gracias a Pedro Pablo Kuczynski, PPK, y los promotores de la candidatura del norteamericano, lobista internacional y potencial gallo de tapada del humalismo (ya lo hemos oído defender a la indefendible primera dama, Nadine Heredia). Los contendores naturales para 2016 eran Keiko Fujimori (Fuerza Popular-K); Alan García (Apra) y un frente unido de izquierdas con Verónica Mendoza o Marco Arana a la cabeza. El factor PPK ha venido a desordenar el escenario.
Los “pepecausas” apuntan a capitalizar el voto anti-Keiko (los “nakers”), craso error. Vaticino que PPK no pasará a segunda vuelta y que García capitalizará la intromisión del casi octogenario aspirante cuya campaña se está pareciendo demasiado a la de Mario Vargas Llosa (1990), con errores y todo: pactos evidentes con los principales medios y los empresarios (aliados hoy del de turno); un discurso liberaloide ajeno a la tradición y a los valores del votante promedio.
En 1990 se enfrentaron dos personajes ajenos al espectro político: el escritor y el ingeniero agrónomo. En 2016, sin embargo, en la arena hay dos viejos zorros políticos: PPK, alguna vez accio-populista, luego toledista y hoy caudillo de sí mismo; y García, dos veces presidente y siempre aprista. Si profundizamos
en temas de corrupción (que por desgracia le interesan un bledo al votante), ninguno saldrá limpio de polvo y paja. La única químicamente pura en eso, es Keiko (y no le achaquen las corruptelas del gobierno del padre, pues no son su responsabilidad).
PPK se exhibe con lo más blanco del Perú, mientras García arma alianzas estratégicas con diversos sectores políticos (allí están los coqueteos con Lourdes Flores) y sociales (recibe y escucha a todos los sectores). PPK al jalarse a Bruce evidencia que promoverá la agenda internacional del aborto, legalización de las drogas y etc…; mientras García aparece como un sesentón más conservador, que se ha movido hacia la derecha del centro.
SI García gana en primera vuelta será porque a Keiko le falta aún foguearse en la batalla por el voto, pero si triunfa en segunda vuelta será gracias al metiche Kuczynsky
Los “pepecausas” apuntan a capitalizar el voto anti-Keiko (los “nakers”), craso error. Vaticino que PPK no pasará a segunda vuelta y que García capitalizará la intromisión del casi octogenario aspirante cuya campaña se está pareciendo demasiado a la de Mario Vargas Llosa (1990), con errores y todo: pactos evidentes con los principales medios y los empresarios (aliados hoy del de turno); un discurso liberaloide ajeno a la tradición y a los valores del votante promedio.
En 1990 se enfrentaron dos personajes ajenos al espectro político: el escritor y el ingeniero agrónomo. En 2016, sin embargo, en la arena hay dos viejos zorros políticos: PPK, alguna vez accio-populista, luego toledista y hoy caudillo de sí mismo; y García, dos veces presidente y siempre aprista. Si profundizamos
en temas de corrupción (que por desgracia le interesan un bledo al votante), ninguno saldrá limpio de polvo y paja. La única químicamente pura en eso, es Keiko (y no le achaquen las corruptelas del gobierno del padre, pues no son su responsabilidad).
PPK se exhibe con lo más blanco del Perú, mientras García arma alianzas estratégicas con diversos sectores políticos (allí están los coqueteos con Lourdes Flores) y sociales (recibe y escucha a todos los sectores). PPK al jalarse a Bruce evidencia que promoverá la agenda internacional del aborto, legalización de las drogas y etc…; mientras García aparece como un sesentón más conservador, que se ha movido hacia la derecha del centro.
SI García gana en primera vuelta será porque a Keiko le falta aún foguearse en la batalla por el voto, pero si triunfa en segunda vuelta será gracias al metiche Kuczynsky