sábado, octubre 22, 2016

Gobierno de enredos

Solo al presidente Pedro Pablo Kuczynski puede responsabilizarse por las sucesivas crisis de su gobierno. Haría bien en meditar sus palabras, deshacerse de los cuestionados personajes que lo rodean y transparentar sus legítimos vínculos con las empresas con las que está o estuvo vinculado.

Ayer “Hildebrandt en sus Trece” reveló que PPK figura como apoderado de la empresa española Devon Iberia S.L., propietaria del 44,33% de las acciones de Servosa, "transportadora de mineral y abastecedora de gas de proyectos mineros, entre ellos Las Bambas”. Ahora bien, PPK puede figurar como apoderado y no serlo pues a veces las empresas tardan en inscribir renuncias; pero aun así el asunto resulta espinoso.

Las Bambas ha desatado un conflicto socioambiental que ha dejado ya 35 heridos, entre pobladores y policías, y un comunero muerto, el señor Quintino Cereceda Huisa. Todo esto por la violenta intervención policial, inconsulta según el ministro del Interior Carlos Basombrío; a tal caos hay que sumar el dolor de la viuda de Cereceda, Antonia Huillca, quien durante treinta horas y a la intemperie, tuvo que cuidar el cadáver de su esposo esperando la llegada de un fiscal.

PPK debe transparentar sus vinculaciones empresariales para evitar informes mediáticos que siembren dudas, animadversiones y eventualmente den pie a comisiones investigadoras. Kuczynski debe también medirse al hablar de terceros y mostrar coherencia con sus dichos.

En reunión de la Asociación de Municipalidades del Perú-Ampe, expresó incomodidad por su bajo sueldo de 16,000 soles (eso es más de 18 veces, el sueldo mínimo); mencionó las bajas remuneraciones de los alcaldes y se lanzó implícitamente a la yugular del presidente Alan García, diciendo “son herencias demagógicas de la época de ese decreto porque el que hizo esas reformas tenía toda la plata del mundo”. Tras esa mención, un 'tuit' del propio García dio cuenta que PPK lo llamó para reunirse en su casa, en la de Alan. ¿Total? 

Ayer Kuczynski "ideó" un Consejo de Estado contra la Corrupción sin base legal alguna que lo contemple en el que incluyó a los presidentes de los otros dos poderes del Estado (Legislativo, Luz Salgado, y Judicial, Víctor Ticona). Desvirtuando la separación de poderes y las funciones de fiscalización y sanción de estos sobre el mismo poder Ejecutivo. Estas reuniones de foto son propias de malos estrategas de crisis. El presidente debería mejor escuchar a su ministra de justicia, Perez Tello y "separar los gorgojos del arroz" y no permitir que uno de ellos pretenda endilgarle a la presidenta del Congreso las corruptelas que rodea a Palacio.


Martha Meier M.Q
Expreso, 22 de octubre de 2016