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sábado, marzo 25, 2017

Acueductos para el Perú

El gobierno debería impulsar alianzas público privadas para la construcción de un sistema eficiente de acueductos, porque buena parte de peruanos carece de acceso diario a fuentes de agua limpia.

Doce millones de compatriotas sufren por la falta de agua en el territorio nacional; más de dos millones de ellos viven en Lima y todos sobreviven en un permanente estado de emergencia sanitaria no declarada, y probablemente con deshidratación crónica. Para millones de hombres, mujeres y niños es como si aquí hubiese una guerra.

La magnitud de nuestro problema puede entenderse claramente si recordamos que, en 2015, durante la interminable guerra de Siria, cinco millones de personas sufrieron cortes prolongados en el suministro de agua y la noticia dio la vuelta al mundo movilizando a varias agencias de Naciones Unidas. El doctor Peter Salama, entonces director regional de Unicef en Oriente Medio y África del Norte, dijo algo que a los sacha-liberales criollos no les gusta escuchar: “el agua potable es tanto una necesidad básica como un derecho fundamental, en Siria y en cualquier lugar”. Y “cualquier lugar” nos incluye.

Ayer una nota de la periodista María Del Carmen Yrigoyen, en el semanario de Hildebrandt, sacó a luz la realidad de los “sin agua”. En ella revela que, en 2016, solo en Lima “había 682 asentamientos humanos y cooperativas a los que no les llegaba agua potable”, esto según datos del ingeniero Jorge Poma, de la ONG “Peruanos sin agua”.

Así de mal estamos, y eso no es culpa de los huaycos ni del clima sino de la corrupción y la indiferencia de los sucesivos gobiernos que priorizan el desarrollo de las actividades extractivas y megaproyectos de infraestructura energética, pensando -las más de las veces- en recibir sobornos en la misma mano -derecha o zurda- con la que firman contratos lesivos para la patria.  

El Perú necesita una planificada red de acueductos, más que elefantes blancos como el Gasoducto Sur Peruano, GSP, (hoy detenido) para el cual no existen reservas probadas de gas suficientes, pero sí comprobada corrupción desde la licitación misma y un sobrecosto mayor a cuatro mil millones de dólares, fina cortesía de Odebrecht y asociados.

Una pregunta para los multi-expertos defensores e incrédulos de la cutra brasilera, ¿cuántos compatriotas tendrían hoy acceso al agua potable con los miles de millones robados en varias obras de esos consorcios brasilero-peruanos?

Y sí mis estimados libertarios, “liberaches” y mercachifleros, el agua segura y su adecuado suministro es un derecho fundamental, y de las pocas cosas que deberíamos subsidiar directamente, con un sol o más cargados a nuestros recibos de Sedapal. ¿Ok? 

Martha Meier M.Q.

Expreso, 25 de marzo de 2017

sábado, marzo 18, 2017

Se previene, no se lamenta

El presidente Pedro Pablo Kuczynski decidió no declarar el estado de emergencia en el ámbito nacional porque: "Si bien hay fallecidos y damnificados, no es un porcentaje alto de la población”. Hay ya 62 muertos y 600 mil damnificados. ¿Cuántos muertos son necesarios? ¿Cuánta más angustia y sufrimiento?

En Piura colapsaron los desagües y la gente está expuesta a aguas servidas, las ratas han salido de las alcantarillas, escasea el agua potable y ya hay casos de leptospirosis entre niños. El doctor Hernando Ceballos, congresista del Frente Amplio, dijo ayer en RPP que desde hace un mes, sí un mes, hay quince mil caseríos aislados y que están dadas todas las condiciones para la aparición de diversas epidemias.  

En su mensaje al país, PPK dijo que vivimos un “problema climático que no se podía prever”. ¿Perdón? La tecnología permite hoy saber que fenómenos climáticos se avecinan, conocer cuándo y dónde se forma un huracán y si se avecina una tormenta de nieve. Es más, algo tan simple como “weather channel” es capaz de anticiparnos hasta en diez días datos certeros sobre el clima, la temperatura, nubosidad y probabilidades de lluvia usando un radar doppler. Y claro, si el satélite francés comprado por el humalismo hiciera lo suyo el gobierno hubiese podido prever lo que hoy vivimos.
   
Los huaycos son recurrentes en esta temporada del año; esta vez solo han sido mucho más intensos. Hace más de un mes, Ada Constantino, gerente municipal de la Municipalidad de Lima solicitó oficialmente a Defensa Civil (INDECI) para declarar la emergencia de las fajas marginales de los ríos Rímac, Chilló y Lurín, y distritos limeños de los conos, recicibiendo respuesta negativa de INDECI por no haber sustento técnico. ¿Lo supo el gobierno central?

Kuczynski ha declarado en emergencia la carretera central, que hoy es un río y a los distritos más azotados (justamente los que ahora entran en emergencia).   Sin duda, más zonas caerán en la categoría.

¿Y cómo estamos? En Trujillo la Plaza de Armas volvió a inundarse. El río Marañón ha tenido una gran crecida alcanzando las zonas de cultivo en San Buenaventura, Huánuco; el miércoles la ciudad de Puno sufrió granizada e intensas lluvias que anegaron varias calles.


No aceptar lo que pasa y las posibilidades de empeorar, no es buena estrategia. Recordemos…

En enero de 1962 un terremoto desmoronó parte del pico norte del Huascarán provocando un alud que borró del mapa a Ranrahirca. Meses más tarde la NASA alertó de una fisura en otra parte del Huascarán y con ello de otro potencial alud. Se recomendó que Huaraz empezara a crecer en las zonas altas.

El 31 de mayo de 1970 un terremoto desprendió la parte debilitada del macizo, se produjo un alud que sepultó buena parte de Huaraz. Lo único construido en la zona alta había sido el nuevo…¡cementerio!

Dicho esto, al gobierno le conviene ponerse en el peor de los escenarios. 

Martha Meier M.Q.

Expreso, 18 de marzo de 2017

sábado, marzo 11, 2017

Nausea en portada

Beto Ortiz ha sido víctima de la portada más infame de Caretas. Sí, la misma publicación que en un pasado remoto fue referente de periodismo bueno y decente. Con su última carátula, Caretas ha caído en el silo de la crónica roja-mentirosa, es decir en el más perverso tipo del morboso género.

La revista fundada por la legendaria Doris Gibson y hoy timoneada por su nieto, Marco Zileri, ha usado el asesinato del videasta José Yactayo para lanzar sospechas sobre el escritor y periodista Ortiz. Vaya usted a saber si por antipatía, encargo o para tratar de crear una cortina de humo intentando lo imposible: tapar la magnitud de la corrupción de cuello y corbata instaurada en el Perú por la constructora brasilera Odebrecht y sus pares peruanas, o la incapacidad de las actuales autoridades para proteger a la ciudadanía.

Zileri, el junior, seguramente justificará con mil excusas esa vocación tan suya para intentar dañar honras, cosa muy distinta es que pretenda que los periodistas nos callemos ante sus bajezas. No pues. Su portada muestra a Beto Ortiz cruzado por un cintillo negro con el llamativo titular “Crimen Yactayo”; en una llamada a su lado se lee “La pista de Piedras Gordas y la evidencia manipulada por Beto Ortiz”. Y así, sibilina y subliminalmente pretende vincular a Ortiz con el asesinato. La nota interior es más de lo mismo y no lleva firma, confirmando que Caretas cuenta con escriba-sicarios, capaces de todo por su quincena, mientras no quede rastro de su santo y seña.

Conozco al periodista Beto Ortiz y lo admiro como escritor y como colega. No somos amigos, pero de una u otra manera nuestros caminos se cruzan de tanto en tanto. No puedo más que expresar la náusea al ver cómo ciertos medios trafican con la tragedia ajena (el asesinato de Yactayo) y repiten acusaciones irresponsables y sin fundamento, sin citar las aclaraciones dadas por Ortiz.

Vaya en estas líneas toda mi solidaridad con Beto, mis sentidas condolencias a la madre y hermana del buen Pepe Yactayo y mi exigencia, como ciudadana y contribuyente, a las autoridades pertinentes para que investiguen a fondo y con seriedad el asesinato de un creador que vivirá por siempre en sus exploraciones con la cámara, el sonido y la palabra escrita. Con ustedes Yactayo en: http://rutatransmedia.blogspot.pe/

Martha Meier M.Q.

Expreso, 11 de marzo de 2017

sábado, marzo 04, 2017

No hay peor ciego…

Ayer viernes el Semanario “Hildebrandt en sus Trece” publicó un documento que complica más la crisis económica, reputacional y legal de la otrora prestigiosa y emblemática constructora Graña y Montero (GyM). Se trata de la resolución del fiscal Hamilton Castro que dispone abrir investigación a la Constructora Área S.A.C., por ser parte de un “presunto esquema de lavado de dinero”. El dinero para Àrea S.A.C. salió del consorcio IIRSA-Norte, es decir del consorciado trío Odebrecht-Graña y Montero-Andrade Gutiérrez; la cifra cercana a los nueve millones de dólares fue entregada, en armadas, en 2007, en plena ejecución de la Interoceánica del Norte (IIRSA-Norte).

Preocupa el estado de negación de los propietarios, directores y empleados de GyM que en comparsa exhiben el logo de la cuestionada empresa en sus perfiles de Facebook con el lema #TodosSomosGrañayMontero, como si esta fuese víctima y no la parte peruana de una mafia global de cuello y corbata. El comandante mayor de esa mafia fue Marcelo Odebrecht, un hombre que ante el peso de las pruebas se allanó para convertirse en unos de los colaboradores más eficaces de la justicia brasileña. Hoy purga prisión aunque su pena será menor gracias a su contribución para derrumbar el andamiaje de la corruptela que su propia empresa creó.

Para el semanario de Hildebrandt, el pedido del fiscal Hamilton Castro es una prueba irrefutable de los sospechosos movimientos financieros de los consorciados Odebrecht-Graña y Montero. Hoy la dupla, como Concesionaria Chavimochic S.A.C., pretende demandar al Estado peruano, es decir a todos nosotros inocentes contribuyentes, solicitando un “arbitraje internacional” para no perder ni un céntimo. ¿Juntos hasta el fin, pese a que según GyM, Odebrecht es su “enemigo”?

La semana pasada se supo (por un documento de la fiscalía, publicado por el semanario de Hildebrandt) que Jorge Barata sostiene que Graña sabía de los sobornos y que aportaba la parte correspondiente. ¿Barata miente? Es bastante improbable y hasta imposible porque de su verdad depende pasar apenas dos años bajo cómodo  arresto domiciliario en su amplio penthouse, o ser recluido en una celda por largos años. ¿Alguien se arriesgaría a lo segundo?

Los periodistas Gustavo Gorriti y Romina Mella de IDL-Reporteros, en colaboración con el diario “La Prensa” de Panamá realizaron una profunda investigación del caso “Lava Jato” en Perú, y fueron los primeros en dar el campanazo sobre el desvío de fondos de Odebrecht-GyM a una serie de empresas “fantasmas”. Ver: https://idl-reporteros.pe/los-pagos-secretos-de-odebrecht-en-el-peru/.

Salvar a GyM pasa hoy por lograr que sus directivos colaboren con la justica, caso contrario la veremos desmoronarse y ser intervenida por sus acreedores o comprada a precio de regalo. Ahora bien, de eso que se preocupen los Grañas y los Monteros; mi dolor pasa por la forma en que los pecados de mi primo José Graña Miró Quesada enloden a la empresa que es nuestra herencia común, “El Comercio” bastante silencioso sobre este espinoso tema.

Martha Meier M.Q.

Expreso, 04 de marzo de 2017